jueves, 22 de diciembre de 2011

Las flechas en la aljaba (XVI) Mi casa, ¿es digna de Dios?

Nuestra vida la organizamos ordinariamente alrededor de las cosas materiales


Vivimos continuando la inercia de lo que hicimos ayer, de lo que hicimos el mes pasado, de lo que hicimos antes en nuestra vida, sin pararnos a pensar, si comprobar si necesitamos cambiar algo.


¿Hemos dejado espacio a Dios en nuestras vidas?


Todo lo que nos rodea y lo que somos, ¿es digno de Dios?


Si María y José estuviesen buscando un lugar para convertirlo en el hogar del Niño Jesús, ¿elegirían nuestra casa y todo cuanto ésta contiene y representa?


Madre Teresa de Calcuta


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