jueves, 19 de febrero de 2009

¿Existió Pilatos?


Con mucha frecuencia, a lo largo sobre todo del siglo XIX y XX, nos hemos encontrado con pretendidos estudios dedicados a poner en entredicho cualquier viso de historicidad de los Evangelios y, en general, de la Biblia.

Todos los textos bíblicos no son de naturaleza histórica: los hay literarios, oraciones, textos legislativos, etc. Pero negar la historicidad de ellos es como negar su autenticidad, es decir, que proceden de la mano que los escribió en la época en que fueron escritos.

Por esto es tan importante cuando salen a la luz datos objetivos que ayudan a conectar los hechos y personajes que aparecen en los textos bíblicos con la realidad histórica. Este es el caso del personaje del que quería comentar hoy, que es Poncio Pilatos.

Aunque ya hace unos años del descubrimiento arqueológico que quería comentar, no es muy conocido por la amplia mayoría del público, pues estos temas no suelen salir en los medios informativos.

En 1961 se encontró en el teatro romano de Cesarea Marítima una inscripción epigráfica que debió pertenecer a algún edificio público edificado por el gobernador Poncio Pilatos en el siglo I, y después reutilizada para el teatro (ver foto adjunta a este texto).

En dicha inscripción se lee: (Pont)ius Pilatus...( Praf)ectus Judae.

De Poncio Pilatos tenemos constancia por los Evangelios y por otros autores no cristianos, como Flavio Josefo y Filón. Sin embargo, la importancia de este descubrimiento reside en dos datos:

- ser la primera epigrafía con el nombre de Pilatos, lo que contribuye a remarcarlo como personaje histórico y no como leyenda inventada por los cristianos.

- dejar constancia de cuál era su cargo en Judea, y ahora tenemos el dato de que era Prefecto. Esto concuerda con los escritos neotestamentarios, pues en ellos, el evangelio de Mateo siempre llama a Pilatos con el nombre genérico de gobernador; Lucas hace lo mismo dos veces, e igual en los Hechos de los Apóstoles. En el resto de los escritos neotestamentarios, no se le da título alguno.

Para profundizar en los títulos de gobernador (genérico) y de prefecto o procurador se puede consultar el magnífico libro "Arqueología y evangelios" de Joaquín González Echagaray, publicado en Verbo Divino en 2002, aunque hoy es difícil de encontrar.

Otros enlaces:
Cronología bíblica
Hipótesis sobre Jesús

1 comentario:

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